Azaleas
Peligrosos frutos de cáctus. Se asemejan a inofensivos duraznitos, sin embargo, cuando se los toma en la mano, sueltan unas espinillas microscópicas que penetran a través de la piel, provocando ardor, picazón e irritación cutánea, a la par que se siente como si se tuviera cientos de espinitas clavadas. Se debe recurrir lo más pronto posible a la canilla más cercana, lavarse con abundante agua. Evitar previamente a este lavado, tocar el rostro u otras partes del cuerpo, a fin de evitar más molestias. Parecen coquetos e inofensivos, pero no son más que caza-curiosos!
Pata de vaca
Laurel real.
Hongo
Grewia occidentalis
Cóculus
Cedro colgante
Cardamomo
Cedro colgante
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